Add parallel Print Page Options

»Pero ahora tú, Señor y Dios nuestro, por un breve momento nos has mostrado tu bondad al permitir que un remanente quede en libertad y se establezca en tu lugar santo. Has permitido que nuestros ojos vean una nueva luz, y nos has concedido un pequeño alivio en medio de nuestra esclavitud. Aunque somos esclavos, no nos has abandonado, Dios nuestro, sino que nos has extendido tu misericordia a la vista de los reyes de Persia. Nos has dado nueva vida para reedificar tu templo y reparar sus ruinas, y nos has brindado tu protección en Judá y en Jerusalén.[a]

10 »Y ahora, después de lo que hemos hecho, ¿qué podemos decirte? No hemos cumplido los mandamientos

Read full chapter

Footnotes

  1. 9:8-9 En el hebreo de estos versículos, Esdras se refiere a Dios en tercera persona.